Vuelta al cole

 

Volver al cole después del largo período de vacaciones supone muchos preparativos y diversas emociones.

 

Los papás y mamás pueden sentir alivio al pensar en volver a adquirir una estabilidad en cuanto horarios,… pero al mismo tiempo pueden sentir agobio por la preparación de un nuevo curso y en otros casos por ser el primero. Los niños y niñas pueden tener muchas ganas por volver y ver a sus compañeros, de saber cómo será su nueva clase, maestra/o,… pero también pueden estar desmotivados, con miedos o sin ganas de iniciar la nueva etapa.

 

Ante este mes de septiembre reiniciar con los hábitos y las rutinas ayudará a llevar de manera más fácil la vuelta al cole. Volver a reestablecer los horarios de sueño y comida, reincorporar las actividades extraescolares,… y también empezar con nuevos aprendizajes como pueden ser quitarle el chupete, afrontar una rabieta, mejorar el hábito del estudio,… todo ello puede suponer dificultades a las que los padres y madres deben enfrentarse. En todos estos casos, la figura de un profesional, en este caso el psicólogo, es de gran ayuda para poder agilizar y llevar a cabo la mejora en dichas áreas.

¿Son normales las rabietas de mi hijo?

Existen conductas agresivas evolutivamente normales, por muy exageradas y desagradables que parezcan, pero que forme parte de su desarrollo no quiere decir que haya que esperar a que crezca para que se le pase; en la mayoría de los casos será la intervención de los padres la que marque la diferencia entre un niño con alteraciones en su comportamiento y otro con conductas adecuadas.

 

La típica muestra de conducta disruptiva es la rabieta, que tiene distintos objetivos según la edad del niño:

¿Qué es la autoestima?

La autoestima es la valoración que uno tiene de sí mismo y se establece a través del propio grado de aceptación y del concepto de uno mismo.

Es en la infancia cuando se construyen los cimientos de al autoestima. Ésta, es cambiante y depende fundamentalmente de los acontecimientos que ocurren alrededor del niño y de cómo éste los valora o los interpreta.

¿Tiene mi hij@ dificultades en las habilidades sociales?

¿Le cuesta relacionarse? ¿Es fácilmente influenciable? ¿Comparte los mismos gustos que otr@ amig@ con la finalidad de caer bien? ¿Puedo definirlo como retraido o con dificultades en las conversaciones? ¿Presenta dificultades para argumentar ante una opinión? ¿Tiene dificultades en la resolución de problemas? ¿Es de los que no llaman y espera a que le llamen para salir? ¿No sabe decir que no?…