MUJERES Y ASOCIACIONISMO

El pasado martes 23 de noviembre la Concejalía de Igualdad del Ayuntamiento de Benidorm en el centro Municipal Torrejó acogió la conferencia sobre “Mujeres y Asociacionismo” impartida por Jéssica Sanchis, psicóloga, en conmemoración al Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer que se celebra anualmente el 25 de noviembre.

La charla-taller ha versado sobre el origen del feminismo en el siglo XIX y las reivindicaciones que este movimiento tiene en el terreno político, educativo y laboral. También se ha hablado sobre como surge el asociacionismo femenino en la historia y la fuerza de estos movimientos.

Ha comentado que el asociacionismo supone la agrupación de personas constituidas para realizar una actividad colectiva de una forma estable, organizada democráticamente para un mismo fin. Se persigue con ello la transformación de la realidad a través de la participación social. Es decir, independientemente de tu cultura, tu ideología, tu forma de actuar o entender la vida, tenemos un objetivo común.

A través de la unión en colectividad de las mujeres a lo largo de la historia se han conseguido los derechos de los que muchas de mujeres disfrutan hoy en día. Las asociaciones de mujeres surgen como movimientos en pro de la emancipación, la liberación y la igualdad de derechos democráticos. En la actualidad siguen siendo un vehículo para seguir con distintas reivindicaciones.

La charla finalizó con una reflexión en la que se hizo partícipes a todos los asistentes y se les ofreció una actividad muy interactiva llegando a todos ellos de manera muy satisfactoria.

 

HABLEMOS DEL SUICICIO

Cuando una persona piensa o intenta suicidarse, siempre lo hace para eliminar el dolor. Está sufriendo un gran malestar emocional e intenta realizar una conducta para acabar con él. Además, el 75% transmite advertencias previas y conocemos algunas de las señales que nos pueden ayudar a identificar que una persona tiene ideaciones suicidas. No se debe banalizar ni trivializar expresiones contextualizadas como “no aguanto más”, “no deseo seguir viviendo”, u otras más sutiles, aunque con el mismo significado como “mi familia estaría mejor sin mí”, “estoy muy cansado”.

 

Cabe destacar que cada 40 segundos, una persona se suicida en el mundo (OMS); en España, cada día se quitan la vida 10 personas, y en la Comunitat Valenciana (según la Generalitat) en 2020 hubo 430 suicidios.

 

Podemos hablar de factores de riesgo (no tener una red social, sentirse aislado, tener una autoestima baja, alguna enfermedad mental o física, etc.)  y de algunos comportamientos o palabras que nos pueden dar pistas como, por ejemplo, expresar que tienen sentimientos de que es una carga, o si tras un periodo de depresión de repente se muestran muy tranquilos o contentos; realizar ciertas búsquedas en internet, alejarse de algunas personas y cesar actividades habituales, acumular medicamentos, si empiezan a no dormir o a dormir en exceso, hacer un testamento, así como atender algunos asuntos propios del final de la vida, entre otros.

 

Por otra parte, también cabe señalar algunos factores de protección que puede tener una persona para trabajar desde un principio como son el apoyo familiar, que sienta cohesión grupal y que perciba que tiene un apoyo social porque así, tendrán a quién acudir en busca de ayuda. Otro de los aspectos importantes es el de saber reconocer y comunicar las emociones y saber resolver los problemas de una manera adaptativa o positiva. Algunos valores como el respeto, la amistad, la cooperación, las creencias religiosas también pueden actuar como elementos de protección frente al suicidio.

 

Hay que evaluar, detectar y detener estas situaciones desde la prevención. Además, la población está sobremedicada. En España se consumen 2 millones de ansiolíticos al día con la intención de solucionar desequilibrios emocionales”, y sabemos que “numerosos estudios demuestran que la terapia psicológica reduce significativamente el consumo de psicofármacos”.

 

Lo que está claro, es que pase lo que pase, “cualquier amenaza o referencia al suicidio, hay que tomarla en serio. Y no se puede culpabilizar ni a la persona que intenta o que consuma el suicidio, ni a las personas cercanas”.

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PSICÓLOGA EN LA MARINA BAIXA: 5 MITOS SOBRE LA PSICOLOGÍA

La vida actual exige constantes cambios que necesitan estrategias para acondicionarse. Podría ser preciso un apoyo para superar la presión ante el entorno y las posibles crisis que suelen surgir. Uno de los objetivos de la Psicología Clínica a través de tu psicóloga en Benidorm, es ayudar a las personas en la búsqueda y consecución de la satisfacción y del bienestar vital, así como la eliminación del sufrimiento y desinterés por la vida.

A pesar de los múltiples cambios y novedades, en la actualidad, existen gran cantidad de mitos y creencias erróneas acerca de los psicólogos y la psicología, que se mueven desde la posición del que afirma que “no cree en la psicología” o “no se fía de los psicólogos” a quien piensa qué si habla de sus problemas con un psicólogo, éstos se solucionarán por sí mismos. Este artículo pretende romper algunos de estos mitos y servir de orientación para quienes tienen dudas o no están seguros de qué es lo que un psicólogo puede hacer por ellos.

Mito 1: “Los psicólogos están locos y por eso estudiaron psicología”.

¿Qué es estar loco? Esto no existe; existen los trastornos, y hasta cierto punto todas las personas tenemos algo de ellos. Además, la psicología no se enfoca solamente en el área clínica, también está el área social, laboral, neuropsicológica, deportiva… y ¿queremos decir que un psicólogo laboral estudió esto porque quería encontrar trabajo? Todos lo queremos, ¿no? Esto significa que cada estudiante de psicología tiene su motivación personal para haber elegido esta carrera. Si revisamos las demás profesiones, creemos que los médicos lo son porque querían buscar cura a su enfermedad, los electricistas porque querían instalarse toda su casa, los maestros para enseñar a sus hijos…

Mito 2: “Las personas que acuden al psicólogo están locas o son débiles”.

El acudir al psicólogo no tiene un solo motivo. Podemos encontrarnos con varias problemáticas: de pareja, familiar, laboral, por estrés, escolar, problemas de conducta, problemas de ansiedad, depresión, dificultades en las relaciones sociales… y un sinfín de variedades. Además, cada profesión tiene su especialidad, es decir, cuando nos duelen las muelas, acudimos al dentista y no por ello somos débiles, por la misma razón, acudir al psicólogo nos indica que lo hacemos al profesional especialista de la conducta humana; más bien, esto sería un acto de responsabilidad.

Mito 3: “Las personas no pueden cambiar, cada uno es como es”.

Es verdad que todos presentamos una carga genética y biológica preestablecida, pero la otra parte es ambiental. Esta última es cambiante. ¿Quién no alguna vez ha cambiado de opinión sobre un tema o una persona? De igual manera podemos modificar parte de nuestra conducta o pensamiento si estamos motivados para ello.

Mito 4: “Los psicólogos son capaces de leernos la mente o adivinar todos nuestros problemas”.

El psicólogo es un especialista en analizar y evaluar nuestros problemas. No obstante, necesita de la ayuda del paciente para que este le dé información de sus dificultades. Esta recogida de información, el psicólogo la realiza a través del proceso de evaluación, en el cual analiza el origen del problema, sus características, cómo nos afecta, los intentos previos para solucionarlo, otros tratamientos seguidos… todo ello mediante la entrevista u otros instrumentos como cuestionarios o autorregistros.

Mito 5: “Solo con contarle mis problemas al psicólogo, éstos se solucionarán”

En varias ocasiones parece que hablar sobre los problemas hace que la persona ya sienta alivio; esto no significa que de esta manera vayan a desaparecer los problemas. En la terapia psicológica el paciente y el psicólogo han de implicarse de manera activa para poder eliminar las dificultades que presente.

Después de esto podemos conocer que es un psicólogo y como puede ser tu psicóloga en Altea, Benidorm, La Nucia, Callosa d’en Sarrià, Alfaz, La Vila Joiosa y toda la Marina Baixa. Tu psicóloga se adapta a tus circunstancias e incluso puede realizar psicoterapia online si te es difícil desplazarte. Los psicólogos trabajamos con problemas emocionales. Lo que primero hacemos es averiguar porque empieza la persona teniendo el problema y porque sigue teniéndolo (a pesar de todos los esfuerzos). Lo que hace el psicólogo es similar a un entrenador o un guía; observamos a la persona para ver que hace para solucionar sus problemas y si lo que hace no le lleva a la meta, le guiamos en el camino.